Antonio Flores murió el 30 de mayo de 1995, a los 33 años, justo dos semanas después de que su madre Lola Flores desapareciera, algo que parece afectó muchísimo al artista. Esto sucedió cuando su carrera musical estaba en el punto más alto, y era un compositor de los más respetados, sobre todo gracias al éxito de Cosas Mías, el que a la postre fue su último álbum de estudio de 1994. Se trataba, de un compendio de canciones soberbias y muy bien producidas, es de esos trabajos donde puedes elegir casi cualquier canción del disco como single, porque eran todas excelentes canciones.
Podía gustarte su estilo más o menos, yo recuerdo que en aquella época eran otros artistas españoles los que me llamaban más la atención, pero reconocía una valía compositiva en Antonio muy importante. Pero volviendo a escuchar el disco 25 años después, era variado, bastante rockero en muchas fases, y con esa mezcla perfecta de canciones rápidas y lentas que suele estar en los grandes discos y ojo, sin dejar de ser un disco de su época totalmente.
Uno de los temas que siempre recuerdo es Siete vidas, donde hablaba de una relación larga interrumpida, de oportunidades nuevas y su relación con las míticas siete vidas de los gatos.
Os dejo con el tema y vídeo de 7 Vidas.
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