Como dije aquí allá por el mes de octubre del año pasado, a tenor de su single Taking me back, se barruntaba nuevo trabajo de Jack White, pero a principios de año se confirmaba que no será solo uno si no dos, el pasado 8 de abril salió Fear of the dawn (donde estará aquel single Taking me back) y el 22 de julio verá la luz el segundo con el título de Entering heaven alive, ambos saldrán en su sello Third Man Records. Al parecer cada uno tendrá personalidades definidas por "diferentes inspiraciones, temáticas y estados de ánimo" según la nota de prensa. Taking me back era un tema realmente llamativo, con tintes futuristas, muy rockero, con un constante golpeteo de batería, riffs de guitarra duros y sobre saturados, además de un arreglo musical intergaláctico (me recuerda algo a Muse), en definitiva toda una experiencia sonora, hipnótica y electrizante, algo bastante lógico en un musicazo como este. El otro single titulado Love is selfish, nos muestra el lado más acústico del genio de Detroit, así que toca disfrutarlo, pero que va incluido en Entering heaven alive.
También tuvimos otro adelanto, el tema Fear of the dawn, que da título al disco que saldrá antes muy rockero, de vertiginoso ritmo y de una potencia brutal. Y luego tuvimos un single colaborativo con el artista de rap y hip-hop Q-Tip, titulado Hi-De-Ho, también incluido en Fear of the dawn y donde se mezclan el rock de White y el estilo del rapero. Luego llegó What's the trick? tema rockero de mucho ritmo y donde White se siente muy a gusto con sus efectos y sonidos que adornan. Y más tarde hablé de Eosophobia, uno de esos temas donde la experimentación y la mezcla de diferentes tipos de sonidos, voces dobladas y su guitarra produce un gran tema. Ahora llega Shedding my velvet, tema que cierra el álbum, un medio tiempo de una dulce melodía y tono algo crepuscular.
No hay comentarios:
Publicar un comentario