domingo, 22 de enero de 2017

Concierto Cisco Fran, Madrid, El Pez Eléctrico, 21-1-2017


Para un servidor es un placer que un músico de la talla de Cisco Fran venga a tocar a su ciudad, y que lo haga a un sitio donde yo pincho con asiduidad, es doble placer. La primera vez que vino a El Pez Eléctrico fue con su banda, La Gran Esperanza Blanca, no sé como convencí a mi jefe del garito (músico también, aunque de estilo bien distinto), y allí caí rendido a sus fraseos, su música y sus enormes canciones. Desde entonces, el idilio no sólo se mantiene, sino que no deja de agigantarse y ahora con su recién estrenada carrera en solitario, el corazón me pedía volverlo a traerlo para que presentase Gigante, su primer Ep como Cisco Fran.


Ataviado con su guitarra acústica y sus armónicas, en completa desnudez, nos fue una a una desgranando las canciones de Gigante, nos adelantó otras del Ep que estos días anda grabando y que saldrá allá por primavera, ese Sultán, al que ya le tenemos ganas y alguna cayó de su banda madre, más algún detalle de alguna versión. Es una delicia comprobar cuando buenas canciones son defendidas de manera transparente y con enorme clase, y anoche hubo momentos de verdadero éxtasis para los oídos, incluso para los temas nuevos, que uno ya le ha echado el guante y se los queda en la cabeza hasta que salgan editados. 


En el listado de canciones que Cisco preparó fueron cayendo los 6 temas que componen Gigante, es decir Lonely on the road, Nuestra amistad (homenaje a los compañeros de banda), Día gris, Desaparecer, Gigante bueno y Cielo. Del nuevo trabajo en ciernes descubrimos Coda # 13, Sirenas, La razón y el corazón y Oropel (vaya subidón que me dio esta canción, promete altos vuelos). De las peticiones que hicimos entre los asistentes (vía facebook por el evento) yo fui agraciado con Azúcar y miel de La Gran Esperanza Blanca que el propio Cisco me dedicó, vaya momentazo, porque el tema es una joya y su interpretación fue magnífica.
El resto del tracklist se completaba con En algo acerté, Más allá de la colina dedicada a su hijo cuando cumplió 18 años y A este lado del cristal dedicada a una niña valenciana que tiene un síndrome de difícil y cara sanación, ambas también de la banda.
Hubo dos bises, Moon river aquella cancioncilla que cantaba Audrey Hepburn en Desayuno con diamantes y por aclamación Nostalgia de Bell Ville.


Os dejo con Nuestra amistad, como la cantó Cisco el año pasado en el concierto 30 aniversario de La Gran Esperanza Blanca, y que anoche sonó deliciosa también.

2 comentarios:

  1. En breve biene por Bilbao, tengo ganas la verdad, espero que sea tan gratificante como parece que fue en Madrid.
    Abrazos

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    Respuestas
    1. Addison de Witt: Lo sé, el 11 de febrero, si no fuera porque pincho en Valencia iría a verlo. Te aseguro que fue un concierto increíble.

      Abrazos.

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