Hace 31 años, tal día como hoy fallecía Guy Stevens, el productor del London Calling de The Clash, albúm mítico de la historia de la música, un motivo como otro cualquiera para hablar de un disco realmente especial.
Joe Strummer y Mick Jones capitaneaban una banda nacida del punk, pero que supo evolucionar y tocar otros estilos tales como el rock, ska, reggae, rockabilly, jazz, etc...
Por este motivo es para mi un grupo referente, y de ello dan fé sus enormes discos y temas míticos que han marcado una época.
London calling, su tercer disco, abre con el tema que da título al álbum, clasicazo escuchado en mil y un garitos, con uno de los inicios de líneas de bajo más famosos de la historia.
Brand new cadillac aporta una versión fresca de un clásico del rockabilly. Jimmy Jazz nos deja ver por dónde irán los tiros en este álbum, el punk queda atrás y el grupo saca todo lo grande que lleva dentro, la trompetas salen y los estilos se mezclan.
Hateful es un tema rápido, alegre, muy llevadero. Spanish bombs , a medio tiempo, gran tema para cantar en antros y bares de todo pelaje. Lost in the supermarket anuncia que ya vienen los 80 y que se acabó el punk. En The guns of Brixton ya están aquí los Clash reggae, Wrong 'em Boyo es otra versión acertadísima original de Los Rulers, y dónde las trompetas son una delicia.
Death or glory siguen en la línea de mezcla de rock, reggae y ska, como The Card cheat. Los coros de Lover's rock me emocionan. I'm not down es un derroche rock. Revolution rock vuelve al reggae ,en el que ya estaba instalados.
Y por último este gran disco cierra con el que para mi es una joya absoluta, el Train in vain, cantado de una manera tan maravillosa, como especial, y con esa melodía tan dulzona y juguetona, que denota que el grupo estaba en un momento genial.
Os dejo con el Train in vain en vivo, y disfrutad.