Año 2007, y la banda de Birmingham edita el que sería su segundo trabajo, con unas influencias que van desde los Cure, pasando por Joy Division, los Smiths hasta Echo and the Bunnymen. Aunque a mi es un grupo que siempre se ma parece a Arcade Fire.
El trabajo lleva por título An end has a start y el tema que da título al disco es un vídeo de lo más llamativo, además de definir claramente su estilo, esas chicas que empiezan golpeando el bongo de la batería y que ataviadas con unos leggins de todos los colores posibles, realizan movimientos de caderas ante la absoluta concentración del cantante y sus secuaces.
Tema magnífico para finalizar el mes, que espero os guste.
Disfrutad del vídeo.