lunes, 13 de marzo de 2017

The Offspring - Americana (1998)


En el año 1998 The Offspring, la banda californiana fundada en Huntington Beach, editaba su quinto trabajo de estudio, Americana, y que a la postre ha sido su disco más vendido a nivel comercial hasta la fecha. Por un lado, el álbum tiene un toque más comercial que otros, cosa innegable, pero por otro tiene momentos de punk-rock realmente fuertes. Después de haber pegado el bombazo con Smash en 1994 con el sello Epitah, y ser conocidos en todo el mundo, su continuación, el para mi magnífico Ixnay on the hombre, fue el bajón en ventas, su primera incursión en Columbia Records, que ya editaría este álbum de 1998 a solas con ellos.
Pero cuidado, a mi este trabajo me parece de lo más compacto y rotundo que se ha hecho en los años 90, y desde luego, tiene momentos impactantes con chupinazos de punk-rock incluso toques hardcore, además de los temas más bailongos, y hits, que también los tenía.
La formación, la ya conocida, Dexter Holland como cantante principal y guitarrista, Noodles a la guitarra solista y coros, Greg K. al bajo y coros y Ron Welty aporreando las baquetas.


Después de la intro de Welcome que da la bienvenida, irrumpe ese sputnik de puro punk-rock llamado Have you ever, pero se trata de un trallazo que se va casi a los cuatro minutos, sin embargo Staring at the sun en dos minutos nos lanza todo su empuje, que es mucho, con un estribillo demoledor. Pretty fly (for a white guy) es uno de los hits del álbum, que mezcla punk-rock y funky y que quizás fue desgastada por su excesivo pase en teles, radios, fiestas y demás, pero aislada y con el paso del tiempo me sigue dando un buen rollo que alucinas, eso si, no hay que volverla a quemar. The kids aren't alright, en oposición al mítico tema de los Who, es uno de sus mejores temas de siempre y que se emparenta claramente con temas brutales del Smash, claramente, un trepidante rock, donde todo corre y fluye. Feelings es la versión del álbum de Morris Albert de su tema de 1975, en una adaptación de Dexter realmente bestial, me sigue encantando. She's got issues es para mi uno de los mejores temas del disco, canción melódica, divertida, y en ese rollo de estudiantes americanos adolescentes, fantástica.
Walla Walla es una canción desenfadada, cachonda, divertida, y que sin llegar a los tres minutos cumple su función perfectamente. The end of the line con sus guitarrazos del inicio, nos deja claro la vuelta al punk-rock de tomo y lomo, gran subida de tono. No brakes continua la onda y con toques casi hardcore desata la furia de la banda en dos minutos sin descanso. Why don't you get a job? ese tema fiestero absoluto que mezcla reggae, ritmo ska e incluso gotas de calipso, una canción desenfadada que también se masacró en exceso, misma receta, se coge distancia y se disfruta mejor. Americana se inicia con tambores, hasta que entran las guitarras y se acelera la cosa de manera impresionante, gran sputnik punk. Pay the man con sus ocho minutos cerraba el artefacto sonoro, aunque incluía el track escondido después de un silencio, tema algo experimental, con sonidos hindúes, en fin, para mi la más diferente, pero no por ello desechable ni mucho menos, psicodelia al final, no sabemos si se tomaron un buen canuto en el estudio.


En definitiva, y bajo mi punto de vista, se trata de un álbum que sigue respirando buena salud, aguanta el paso de los años con muchísima dignidad, y da gusto ponérselo de vez en cuando y reactivarse mentalmente.

Os dejo con el divertido vídeo de Why don't you get a job?

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