En 1970 David Bowie con melena rizada y aires de bohemio edita The man who sold the world, uno de sus discos clave de la década de los 70. Aquí probablemente se encuentra el Bowie más rockero y a la vez emparentado con gente como Led Zeppelin o The Who, dejando atrás a la época folk de finales de los 60. Aquí hay psicodelia, country a su manera, letras que hablan de ciencia ficción y alienamientos varios, pero ante todo canciones en mayúsculas, donde no hay canción que baje el nivel en ningún momento, un nivel altísimo.
La canción que da título al álbum es una canción perfecta, interpretada por el genio de manera soberbia y ejecutada por su banda de manera gloriosa (ya estaban las Arañas de Marte junto a él), una historia basada en un cuento antiguo de ciencia ficción "el hombre que vendió el mundo".
Nirvana en su MTV Unplugged de 1994 la rescató y versioneó de manera excelente, convirtiéndola de nuevo en un éxito 24 años después (aunque mucha gente de poca cultura musical, creyera que estaba compuesta por Kurt Cobain).
Os dejo con dos interpretaciones, primero la más fiel, en el directo de la BBC del año 2000.
Y por otro lado una versión en vivo en el programa de Jools Holland en 1995, muy diferente, más tranquila, pero donde el solo de guitarra de Reves Gabrels estremece. Esta otra versión fue Cara B de Strangers when we meet del Outside.
¡Qué maravilla de canción! Siempre recordaré cuando, hace muchos muchos años, Paco Romero vino a mi casa entusiasmado con la versión de Nirvana (sin conocer la de Bowie). Le dije: está muy bien pero sabrás que es de David Bowie, ¿no? Anda, siéntate, que te voy a poner la original. Se quedó...
ResponderEliminarPaco: Tu si que eres grande, tienes anécdotas para parar un carro. Es que Paco Romero siempre ha ido a tu rebufo... es normal. Anda siéntate Paco... que vas a saber quien es el más grande!!!
EliminarAbrazos fuertes Papi.
Qué bueno lo que cuenta Paco. La canción, gloriosa, y el disco, lo que dices, el Bowie más hard que ha habido. Quizá esté un poco tapado por esas dos obras maestras que le siguen —"Hunky Dory" y "Ziggy Stardust", lógico—, pero es un trabajo espléndido.
ResponderEliminarAbrazos, tron.
Gonzalo Aróstegui Lasarte: Grandes los Pacos por Diosss.
EliminarEs que hablamos de otra cara más de Bowie, me ha parecido siempre un disco fastuoso.
Claro, que luego como dices... venía ya el olimpo.
Abrazos.