En 1997 The Smashing Pumpkins, la banda de Chicago liderada por Billy Corgan, edita Adore, un disco que en su día generó mucha controversia, ya que después de su aclamado Mellion Collie and the Infinite Sadness aquí cambiaron el estilo metiendo electrónica y suavizando su energía, cosa que hasta a mi me impactó de tal manera que devolví el disco (en la extinta Madrid Rock). Simplemente no comprendí el cambio, luego los vi en directo en los conciertos de Radio 3 y me empezó a gustar, estaba claro lo que me despistaba: era la producción demasiado edulcorada.
Y en 1998, en el mes de mayo, tocaron para promocionar el Guggenheim de Bilbao, y regalaron muchos temas de Adore, To Sheila, Perfect, Ava Adore, Daphne Descends, más algúnos temas del disco anterior como Tonight, Tonight, Bullet with butterfly wings o 1979.
En aquella época este grupo permanece tras la resaca grunge, la muerte de Kurt Cobain (junto a Pearl Jam, aunque no se parezcan).
Los Smashing Pumpkins de Adore son los más oscuros, menos agradecidos, más autocomplacientes, pese a que se supone que avanzaron porque cambiaron, con ese aderezo electrónico.
La formación mantiene a Corgan en la guitarra y voz, D'Arcy al bajo (preciosa con esa diadema negra con cuernos) y James Iha a la guitarra telecaster, más músicos de apoyo de la clase del teclista Mike Garson (que ha tocado con Bowie), el batería Kenny Aronoff (Jimmy Chamberlyn se recuperaba de sus adicciones) y un par de percusionistas muy competentes.
Os dejo con este gran directo, para el recuerdo y disfrutad.
En aquella época este grupo permanece tras la resaca grunge, la muerte de Kurt Cobain (junto a Pearl Jam, aunque no se parezcan).
Los Smashing Pumpkins de Adore son los más oscuros, menos agradecidos, más autocomplacientes, pese a que se supone que avanzaron porque cambiaron, con ese aderezo electrónico.
La formación mantiene a Corgan en la guitarra y voz, D'Arcy al bajo (preciosa con esa diadema negra con cuernos) y James Iha a la guitarra telecaster, más músicos de apoyo de la clase del teclista Mike Garson (que ha tocado con Bowie), el batería Kenny Aronoff (Jimmy Chamberlyn se recuperaba de sus adicciones) y un par de percusionistas muy competentes.
Os dejo con este gran directo, para el recuerdo y disfrutad.
Recuerdo con 14 años haberlo visto en directo por la tele y quedarme hipnotizado. Aunque Jimmy Chamberlin es mi miembro favorito de la banda (también es mi batería favorito del planeta) con Adore consiguieron un álbum diferente a todos y que con el tiempo, con muchísimas escuchas, se va erosionando y convirtiéndose en más redondo.
ResponderEliminarLoRbAdA: Qué jovencico eres... Pues la verdad es que lo he recordado hoy con un amigo, y si que hipnotiza, es cierto.
EliminarBueno, Jimmy Chamberlin, buen batería, tenía muchos problemas de drogas que le lastraron.
Y si, está claro que es un disco que gana con el paso de los años, y tiene mucho que descubrir en sus 15 temas.
Un abrazo.