La banda madrileña de Tres Cantos, Vetusta Morla, editó en el año 2011 el que era su segundo trabajo largo de estudio, titulado Mapas, después de una intensa y memorable gira de su primer disco, que se alargó más de lo previsto y del que en total dieron unos 200 conciertos aproximadamente, a parte de subir de manera constante y muy meritoria, tanto en su repercusión, como en su estatus como grupo. Al principio, mi acercamiento al álbum fue cuidadoso, pero desde el primer momento noté que el nuevo disco iba a ser una continuación evolucionada del anterior y también con una estructura algo parecida, 12 canciones, mezcla parecida de rápidas y lentas, aunque aquí la instrumentalización era más ambiciosa. Pero claro, a este artefacto sonoro le persiguió durante mucho tiempo la comparativa inevitable con su predecesor, cosa hasta cierto punto lógica, pero eso a medida que se sucedían las escuchas y los conciertos, fue derivando en que era un disco con vida propia, con enormes canciones y un nivel, para mi muy muy parecido al de Un día en el mundo, incluso si se me apura algo mejor. Si bien las canciones del primer trabajo, fueron machacadas hasta la saciedad en el estudio y eran el producto de años y años de trabajo, aquí el valor está en que el tiempo de cocción de estos temas fue menor, teniendo unos resultados casi iguales, por lo que tiene más mérito si cabe.
La épica no la pierden y lo que para mi es un signo muy identificativo, es que musicalmente se emparentan más con una de sus grandes influencias, los británicos Radiohead. La producción es más elaborada, recargada si se quiere decir, pero se trata de una reafirmación de que lo que funcionó antes con retoques deben seguir funcionando y a fe que lo consiguen.
En el apartado personal, este disco fue mi banda sonora diaria en una época de mi vida muy difícil, en la que a una situación laboral muy complicada con sus consecuencias, más situaciones de enfermedades familiares y temas de pareja, me sirvieron y mucho para salir adelante, y de hecho cada vez que me vuelvo a poner el disco u oigo sus canciones en directo, me emociono.
Comienza el álbum con Los días raros, y ya lo digo desde el principio, para mi una de las 3 mejores canciones del grupo. En los directos de esa gira, solían empezar los conciertos con esta pieza de seis minutos y medio en el que es una muestra apabullante de la fuerza de esta banda, una canción con empiece de piano tranquilo, que consigue atmósferas brutales sin caer en lo cargante (cosa nada fácil) con un increscendo tremendo y una letra descomunal: "Toca afinar, definir el trazo, sintonizar, reagrupar pedazos en mi colección de medallas y de arañazos". Lo que te hace grande, como su propio nombre indica, atesora mucha grandeza, riffs de guitarra vigorosos, cambios de ritmo brutales y una letra memorable: "Tal vez lo que me hace grande es tenerte delante otra vez". En el río fue el single de adelanto, y posiblemente la canción que más se emparenta con la onda del primer trabajo, más directo y fresco, y quizás la canción que tiene un estribillo más definido, que en el resto del disco casi no los hay. Baldosas amarillas es una canción delicada y preciosista con una letra especial con referencias a Luis Buñuel, un medio tiempo con su sello. Y llega Boca en la tierra, mi canción favorita del disco probablemente, no hay día que no escuche este tema (que me sé de memoria) y me siga emocionando, sus guitarras que disparan al cielo, su letra que habla de la vida como pocas y la voz de Pucho que lo borda, como siempre. El hombre del saco, es una de las canciones que denota gran evolución en el sonido del grupo, con las maderas como percusiones (que en directo tocan al unísono 3 miembros de Vetusta) y con una letra reivindicativa de los robos que sufrimos.
Maldita dulzura es una copla, con una de las mejores letras que he escuchado sobre relaciones de pareja, tema acústico que quedó adornado en estudio de manera maravillosa, canción ésta cuya idea inicial era ser cantada a dueto. Cenas ajenas posee una letra alucinante, donde Pucho canta de manera descomunal otra vez, y habla de esas familias descompuestas cuyas casas "lanzan mensajes en morse". Mapas sigue el camino, el título que da nombre a todo el trabajo y que, como define la portada, te invita a escoger tu camino de los que hay, con un bajo inicial de Álvaro que ronrronea de manera genial, va de menos a más siendo un tema vigoroso y rápido, muy tocable en vivo. Canción de vuelta es el tema más tranquilo y triste del disco, canción cariñosa y tierna, que da la pausa antes del estruendo final. Escudo humano, con la batería del Indio mandando al inicio junto a las guitarras de Guille y Juanma, es un gran tema con unos cambios fantásticos y una letra bordada. Mi suerte acaba el trabajo, canción de inicio lento que va de menos a más, con coros maravillosos (onda muy Radiohead en la música, me recuerda a Street Spirit (fade out)), de esos temas que te dejan un sabor de boca espléndido con ese aire entre melancólico y oscuro.
En definitiva un tremendo disco, que no tiene nada que envidiar al disco debut y que tiene su camino propio, cosa que ha quedado demostrada en directo donde hay canciones que ya son imprescindibles en cualquier concierto suyo.
Os dejo con el tema Boca en la tierra, interpretado en vivo en el Día de la Música 2011, en el Matadero de Madrid, donde estaba un servidor, flipando.
Ya he comentado en alguna ocasión por aquí que esta banda me gusta mucho más en vivo que en estudio. Queda ratificada dicha opinión.
ResponderEliminarUn abrazo!
Evánder: Lo sé, pero mira, siempre pienso que primero debe haber una base de estudio buena, que en este caso la hay. Lo que es innegable es que esta banda se ha hecho a base de conciertos, y por eso quizás sus directos tengan tanta fuerza.
EliminarAbrazos.
Lo único que dispongo de la banda, y eso porque lo adquirió mi hija. Le dí en su momento varias escuchas sin prestarle demasiada atención. Posteriores audiencias me hicieron valorar con mayor justicia la riqueza del disco y, a fecha de hoy, tengo esta obra como una pequeña pila de agua bendita. No es mi banda española de cabecera pero encuentro, no obstante, que su propuesta es más que interesante. Y eso sin meterme en sus otros trabajos que desconozco del todo. Seguro que si así lo hiciera cambiaría mi impresión a mejores niveles de aceptación.
ResponderEliminarAbrazos,
JdG
Javier de Gregorio: Un discazo que recuerdo haber comentado contigo alguna vez, que si no recuerdo mal, la portada del disco formaba parte de una ruta de la sierra madrileña. Es que es una banda a la que hay que prestar atención cuando se escuchan sus discos. Yo te recomiendo que escuches Un día en el mundo, ya que si este álbum te entró, ese lo hará y más incluso.
EliminarAbrazos.
Gran disco. Desde la primera a la última canción son sublimes y muy muy agradables de escuchar. Un disco para escuchar sentado y tranquilo.
ResponderEliminarGonso: Creo que un servidor te lo grabó. Enorme disco que a mi también me gusta poner mucho en el coche.
EliminarAbrazos.