Después de su paso por Buffalo Springfield, el canadiense Neil Young inicia su carrera en solitario con su álbum homónimo de 1969. Disco algo curioso tanto en su concepción como en su presentación al público ya que utilizó un novedoso por entonces sistema de codificación (Haeco-CSG) que pretendía hacer discos en estéreo que fueran compatibles con reproductores mono, pero degradaban el sonido. Esto ocasionó problemas que afectaban al propio músico, el propio Young dijo: "La mezcla era horrible, intentaba enterrar mi propia voz porque no me gustaba como sonaba". Es por esto que se tuvo que hacer una segunda remezcla que apareció meses después, pero claro tenemos a los fanáticos del artista que dicen que la primera mezcla era mejor, por lo que esos ejemplares de la primera remezcla son pieza rara y codiciada por coleccionistas.
Centrándonos en el disco nos encontramos con el Young más country y con piezas que dibujan en parte lo que luego más adelante demostraría, un trabajo muy melódico y de afligida atmósfera pero que es bastante infravalorado siendo para mi un muy buen álbum con mucha sensibilidad sentimental.
I've been waiting for you es una emotiva pieza interpretada por un frágil Young en proceso melancólico, al que incluso se le nota inseguro a la hora de interpretar, pero que para mi escribe una de sus mejores canciones de su temprana etapa.
Os dejo con I've been waiting for you.
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