Si se repasa la discografía de Bruce Springsteen, y se sabe algo de su historia, enseguida te das cuenta, de que cuando necesita sacar su lado más folk, con guitarra acústica y armónica, no ha tenido reparos en hacerlo, influencias éstas muy de base que ya se aprecian en su primer disco. Posteriormente llegarían sus baños de masas y el rock en estado puro. Pero esa esencia de cantautor folk, con más que unas meritorias letras como en Nebraska o The Ghost of Tom Joad, tuvo su tercer capítulo en el álbum de 2005 Devils and Dust, al que he llegado recientemente y era el que me faltaba.
Con similitudes evidentes a esos dos discos referidos, aquí se apoya en la producción de Brendan O'Brien, retomando las interpretaciones a pelo, desnudas, de tempos lentos cuyas letras son crónicas intimistas y reflexivas sobre personajes con envoltura social.
El tema que da título al álbum, es una balada acústica de tono country-folk, arreglos de cuerda y solos de armónica, mientras la letra habla de un soldado estadounidense en la guerra de Iraq ,desde su punto de vista.
Os dejo con el vídeo de Devils and dust.
No hay comentarios:
Publicar un comentario