Un auténtico placer haber conocido Mundaka y su festival de música, guiado por mi brother Addison de Witt. Sólo fuimos al tercer día, ya que los desplazamientos a este remoto pero paradisíaco lugar, territorio de surfistas, no es una cosa sencilla desde Bilbao, y eso que el tren te tarda una hora. Situado a la ribera del mar, y de su tremenda playa, el festival de música tiene un único escenario donde se congregan todos los conciertos. Esuchamos que The Sheepdogs lo petaron el jueves, como era de esperar, y que Capsula y Danko Jones el viernes estuvieron geniales. Pero el sábado estaba la parte para mi más interesante de esta tremenda concentración musical, ya que por un lado estaba una de mis bandas españolas favoritas, mis Enemigos del alma, y luego The Waterboys, la formación de Mike Scott a la que venero tanto.
Highlights
Nada más llegar pillamos el concierto de los bilbaínos de Arrigorriaga, Highlights, ya empezado, pero lo disfrutamos mucho. Rock enérgico y con buenas influencias de Thin Lizzy, Who y demás bandas míticas. Interpretaron temas de su último EP Storming the gates como Silver Queen, Last Sunset o Out of mind, además de algunas buenas versiones como el Boys are back in town de Phil Lynnot y sus secuaces y el The Seeker de Pete Townsend y los suyos.
Buena banda, que nos dejó gran sabor de boca.
Los Enemigos
Salieron a escena Los Enemigos, la banda madrileña, que dentro de su Tour Intelegente, tocaba en este festival vasco. Empezaron con Brindis, aquel temazo de La Cuenta Atrás, para a partir de ahí ir repasando temas de toda su discografía. Cayeron de Vida Inteligente Cementerio de Elefantes, Santos Inocentes, Vida Inteligente, Cuatro Cuentos y No es igual. Del mítico Nada interpretaron Me sobra Carnaval y An-tonio. De Gas Esta mañana he vuelto al barrio, de La cuenta atrás aparte de la reseñada al principio también la que daba título al álbum y La Otra Orilla. De La Vida Mata escuchamos Septiembre, Desde el jergón y El Gran Calambre final. John Wayne y Complejo de los primeros discos y la versión de Serrat de Señora completaban el tracklist.
The Waterboys
Los cabeza de cartel indiscutibles del sábado y posiblemente del festival eran The Waterboys, cuyo concierto empezó pasado por agua e hizo temer lo peor, pero que se fue arreglando en lo climatológico para poder disfrutar de ellos de manera genial. Siguen de gira de su maravilloso álbum del año pasado Modern Blues, muy favorito mío, del que pudimos escuchar Destinies Entwines, Still a freak, Nearest thing to hip, Rosalind (You married the wrong guy) y Long Strange Golden Road. Del mítico Fisherman's blues cayó We will not be lovers (apoteosis total y absoluta) con Steve Wickman y Brother Paul desatados al violín y órgano, y la propia Fisherman's blues que fue el único bis. Del mítico This is the sea escuchamos Don't bang the drum (sólo Scott al piano y Wickman al violín), The whole of the moon y Medicie Bow. A girl called Johnny de su primer disco fue un momento mágico. De discos recientes, Song of wandering Aengus de aquel disco de 2011, Wonders of Lewis del Dream Harder y ese Nashville, Tennessee, más la versión bestial de Roll over Beethoven de Chuck Berry hicieron que nos quedáramos exhaustos y en mi caso particular muy satisfecho.
Sintiéndolo mucho St.Paul & The Broken Bones se quedaron para otra ocasión.
Os dejo con un par de vídeos.
Primero el Santos Inocentes de Los Enemigos interpretado en aquel Festival para Los Refugiados en La Riviera de Madrid, hace pocas fechas, muy parecido a como sonó ayer.
Y luego el Nearest thing to hip interpretado en vivo en 2015 por The Waterboys.