La bajada de calidad y de estilo de Rod Stewart comenzó en la década de los 80, donde empezó a abandonar todas sus raíces rockeras, para adentrarse en territorios poperos de dudoso gusto. Body wishes en 1983 todavía tenía grandes momentos, y es de lo poquito salvable del escocés, pero con Camouflage ya no hay remedio, los teclados ochenteros se apoderan de todo y la calidad de los temas se resiente. Pero... si, siempre hay un pero, hay una versión en este disco que salva los muebles, y a pesar de sonar ochentera pastelona, la diferencia es que el tema es bueno. Canción compuesta por Jeff Fortgang que hicieron famosa The Persuaders en 1973, la versión de Rod mola, porque le da su toque personal y tiene gancho, a pesar de la maquinaria de sintetizadores repelente.
Os dejo con una versión en directo en 2003, francamente buena, con sus bailes chulos, que me gusta más que la original.
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