Hace unos días (del 15 al 18 de agosto) se cumplieron 44 años de la celebración del Festival de Woodstock, que fue uno de los más hippies e importantes de la historia. Tuvo lugar en una granja de Bethel, Nueva York, y debe su nombre de Woodstock ya que la idea original era que se celebrara en el pueblo de Woodstock, en el condado de Ulster, también en el estado de Nueva York, pero la población local se opuso y se negoció por parte de Elliot Tiber con Max Yasgur para acoger los conciertos en los terrenos de esa familia en Sullivan Country.
En el Festival pasó de todo, hubo 3 muertes, una debida a sobredosis de heroína, otra tras una ruptura de apéndice y una última por un accidente con un tractor. También se produjeron dos nacimientos no confirmados. Hubo 400.000 espectadores, aunque 500.000 dicen haber estado allí, y eso que la organización esperaba que sólo fueran 60.000.
Pero musicalmente hablando, a parte de cierto caos organizativo, el cartel es casi insuperable, sólo faltaron The Doors de los grupos emblemáticos de la época, debido a las parrandas de Jimbo que en esa época estaba detenido.
Santana fue sin duda la revelación del festival, con un concierto antológico. Un grupo que venía de la costa oeste y en la costa este era totalmente desconocido.
Joan Baez, Richie Havens, Tim Hardin, Ravi Shankar, Canned Heat, Grateful Dead, Creedence Clearwater Revival, Janis Joplin, The Who, Jefferson Airplane, Joe Cocker (otro que pegó su bombazo), Jefferson Airplane, Ten Years After, The Band, Johnny Winter, Crosby, Stills, Nash & Young y acabó Jimi Hendrix, a eso de las 10 de la mañana, con un grupo que ya no era la Jimi Hendrix Experience sino Gypsy Sun and Rainbows, lo que denotaba su fractura por aquel entonces.
Todavía a día de hoy escucho a gente que no sabe lo que fue Woodstock (incluso gente que participa en concursos) y lo que allí sucedió, algo imperdonable, es como parte de la cultura general, algo que ha de saberse.
Os dejo con dos momentos míticos de aquel festival, uno la versión de Joe Cocker del With a little help from my friends de The Beatles.
Y el Soul Sacrifice de Santana, una gozada con el que acabaron su concierto, cuando aquel combo era un grupo.
El más grande de todos los conciertos, y el que más significó por su alcanze musical y social sin duda. Destacaría también el "Going Home" de los Ten Years After, están colosales y a Sly and The Family Stone, en otra dimensión.
ResponderEliminarJosé Chepito Areas, a la percusión con Santana, se pasó diez pueblos de bueno.
Recuerdo que cuando a veces me tocaba guardia en la mili, hace mil años, me tarareaba en la garita el triple entero, canción a canción, tal era el colocón que tenía con ese disco.
Algún día tendrás que hacer una pinchada especial "hippie-concerts" y tendrás material para aburrirte. Woodstock, Wight, Knebworth, los Fillmore, Monterrey, Reading, etc...
Abrazos,
JdG
Javier de Gregorio: En efecto, el más grande de todos por muchos motivos. Y si ese Going home es una pasada, pero lo puse cuando murió Alvin Lee y no me gusta repetirme.
EliminarLo de la percusión de Santana por José Chepito Areas es de otro planeta, que maravilla, tengo ese concierto entero y es una pasada.
No me extriñe que te pusieras eso en la mili, así no te aburrías.
Y no lo dudes, todo a su tiempo, pero si, un día haré una pinchada dedicada a todos los grandes festivales de todos los tiempos, muchos de los cuales has nombrado.
Un abrazo.