Hoy sale por fin a la venta el disco de David Gilmour Live at Pompeii, ese directo casi 45 años después de que lo hiciera con Pink Floyd, en aquel anfiteatro donde no tocaba nadie desde 2000 años atrás, un sitio lleno de fantasmas y recuerdos, que se grabó el verano pasado en la mítica ciudad italiana cercana al Vesubio, y donde el músico británico acompañado de una excepcional banda presentaba su último y extraordinario trabajo en solitario, Rattle that lock y además daba un buen repaso a la carrera de su banda madre, Pink Floyd. Hay interpretaciones verdaderamente excelentes, como por ejemplo el mítico Run like hell de The Wall (1979). Cuando vi a Roger Waters interpretar ese disco entero, me falló justo cuando interpretaba los momentos cumbre, es decir, este tema y Comfortably numb y era porque faltaba la guitarra gloriosa de David Gilmour.
Os dejo con la interpretación de Run like hell donde todos van con gafas de sol para no dañar sus ojos con las ráfagas de luces.
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