Una de las bandas señeras del powerpop de los 90 son los norteamericanos de Postdam, New York, Gigolo Aunts, que hace un par de meses estuvieron haciendo su gira de despedida (que un servidor se perdió) y reivindicando su disco de 1999 Minor chords and major themes, que vendían en los conciertos con una reedición de lujo en vinilo, séptimo disco de estudio y a la postre el penúltimo de su época gloriosa. Comenzaron en la década de los 80, editando su primer álbum allá por 1987 titulado Better than fish, y ya sería con su segundo Everybody happy de 1988 con el que se dieron a conocer mucho más. Pero es sin duda la década de los 90 donde desarrollan su carrera a pleno rendimiento y con mayor reconocimiento, discos como Flippin' out de 1993 (quizás su zenit compositivo) o Learn to play guitar del 97. Este Minor chords and major themes puede que no sea su mejor trabajo, pero tiene temas de esos que salvan un disco, y en este caso siempre me pareció que Everyone can fly, que luego dio nombre a un Ep ese mismo año, era de las que tenía calidad suprema, pieza de enorme calidad, un medio tiempo de esos que te enganchan desde la primera nota.
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