La banda californiana The Dream Syndicate editaron su primer álbum en 1982 titulado The days of wine and roses. En ese momento la formación era liderada por Steve Wynn a la voz y guitarra, con Kendra Smith al bajo, Karl Precoda a la guitarra solista (que también componía) y Dennis Duck a la batería. Eran máximos representantes del nuevo rock americano de los 80, junto con unos jovencitos R.E.M. de Athens, Georgia o los californianos The Long Ryders por ejemplo. Hablamos de una corriente que rechazaban los sintetizadores para ir a un sonido rockero más tradicional, pero también con un componente punk bastante apreciable, por un lado su clara influencia de The Velvet Underground lo fusionaban con el sonido Costa oeste y así dotarlo de una psicodelia guitarrera de bastante ímpetu.
El tema que daba título al disco y lo cerraba es un claro ejemplo de lo que decía antes, la voz de Steve Wynn da paso al desparrame guitarrero, en una subida y bajada tremenda dentro de una espectacular melodía.
Cuando lo compré y lo escuchaba (una y otra vez, como si no me lo creyera) me decía, ¡joder, si estos tíos son la réplica contemporánea de Velvet Underground! Pues mira tu por donde, gracias a ellos volvi a desenvainar de las baldas los viejos vinilos de la banda de Lou. Todo ellos sin que signifique desmérito alguno para la banda californiana.
ResponderEliminarPor cierto, ¿qué tal andas?
Abrazos,
javierfuzzy.blogspot.com: Es que tuvo que ser un impacto tremendo amigo, yo por edad lo escuché años más tarde y también me dejó noqueado. Es una banda muy necesaria, y su vuelta me pareció un acierto sublime.
EliminarBueno, ahí vamos, a ver si cogemos unos días de descanso. Espero que tu mejor de tu pierna.
Abrazos.