Como llevo diciendo desde mediados de febrero, Vampire Weekend es una banda de New York que se fundaron en el año 2006 y que empezó a hacerse conocida a través de varios blogs en internet. En 2008 editaron su primer álbum homónimo, un gran debut, con su formación de cuarteto con Ezra Koenig a la voz principal, guitarra, piano y batería de mano, Rostam Batmanglij al órgano, chamberlin, piano, guitarra, armonías vocales y baterías programadas, Chris Baio al bajo y Christopher Tomson a la batería y guitarra, estos dos últimos ya no están en la formación, dejaron el grupo después del tercer álbum y fueron sustituidos por Matt Chamberlein a la batería únicamente quedándose sin bajista.
El pasado 5 de abril editaron su quinto álbum de estudio con el título de Only God was above us y lo hace en el sello Columbia, trabajo que ha sido grabado entre New York, Los Ángeles, Londres y Tokio. La producción ha corrido a cargo de su líder Ezra Koenig junto a Ariel Rechtshaid, ha sido mezclado por Dave Fridman y masterizado por Emily Lazar.
El título del disco proviene del titular de un periódico que aparece en una fotografía de 1988 de Steven Siegel, dicha fotografía llamada Subway Dream 11 también sirve de portada del álbum.
Carpicorn fue uno de los adelantos, un tema de preciosa melodía, algo decadente pero de muy buen tratamiento por la banda. Otro adelanto era Gen-X cops, con un llamativo sonido de guitarra que lleva la melodía al inicio, para luego desarrollar la muy interesante melodía, gran canción. Luego llegó el tercero titulado Classical con un inicio algo caótico y confuso, para luego definirse una interesante melodía pop con cambios muy acertados y detalles curiosos. También hablé de Prep-school gangsters con unos interesantes arpegios de guitarra que llevan la melodía, hasta que entre la voz de Ezra y los demás instrumentos. Hice mi referencia a Ice cream piano con un inicio tranquilo y la voz de Ezra, hasta que pasado un minuto y algo cambia el ritmo y entran los instrumentos llegando a alcanzar un ritmo rotundo y vertiginoso. Ahora hablo de Mary Boone, una canción muy curiosa con inicio con la voz de su cantante y un piano y coros casi de iglesia, hasta que la canción cambio y se convierte en un chill out cósmico, no sé si denominarlo así, una canción sorprendente.
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