Como llevo diciendo desde mediados del mes de junio, Margo Price, la songwriter norteamericana editó nuevo álbum de estudio el pasado 29 de agosto titulado Hard headed woman. Sucede casi dos años después a Strays II, sale a través del sello Loma Vista y tiene entre los invitados en el trabajo a Jesse Welles o Tyler Childers. Price creó el disco junto al productor Matt Ross-Spang con quien trabajó en sus dos primeros discos, Midwest farmer's daughter y All american made.
Price ha declarado en un comunicado de prensa: "Siempre espero hacer como Johnny Cash, que es defender a la gente común, pero ha habido tantas amenazas, ira y virulencia a lo largo de los años, cuando solo provengo de un lugar de amor, así que tomé la decisión de reconstruir todo desde cero. Espero que este álbum inspire a la gente a ser valiente, a arriesgarse y a ser ellos mismos sin complejos, en una cultura que se esfuerza al máximo para que todos seamos iguales".
Don't let the bastards get you down era el primer adelanto, un buen tema de onda country en el que su espléndida voz es la gran protagonista. Luego llegó el segundo que es la colaboración de Jesse Welles en el tema Don't wake me up, un buen country-rock donde las dos voces, después de un inicio de ella sola, empastan de manera estupenda. Más tarde apareció el tercer single titulado Losing streak, quizás el tema con tono más pop, aunque partiendo del country, y donde a un buen puente le sigue un estribillo muy interesante, siendo su voz la gran protagonista. También hablé de Keep a picture, un tema de inicio tranquilo con ese country campestre y violines que destacan hasta que entra su voz y la canción coge ritmo y se convierte en un buen medio tiempo. Hice referencia a Wild at heart, un country-folk de onda alegre y con ritmo donde su voz es la gran protagonista. Ahora llega el último single Nowhere is where, en tono acústico con la guitarra y su voz como grandes protagonistas y en cuyo vídeo ella canta montada a caballo.


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