Anoche era una fecha marcada en el calendario para un servidor, llegaba a la capital una legendaria banda australiana The New Christs, que no giraban desde hace 14 años. Tuvieron de teloneros a Los Chicos, que presentaron su último disco del año pasado Never is too much, además de repasar antiguas canciones. Antonio y Gerardo Urchaga siguen comandando la formación que son ellos los creadores del sello FOLC Records, y que tienen a Rafa Suñén a la voz, Guillermo Casanova al bajo y Raúl García a la batería. Sonaron temas como Another night in Eden, For a while, Tracks, Never is too much, Going to stay o My saturday night del último disco se mezclaron con Land of a million dances, Rock and roll ring u otras. Muchas energía bien canalizada y tocando cada vez mejor en sus shows.
Sus conciertos son de una energía indescriptible y que van de menos a más como fue anoche, provocando el delirio de los asistentes, en una demostración de rock and roll de altos vuelos, con una robusta formación que lo bordó, donde hay miembros de Radio Birdman, Celibate Rifles y Screaming Tribesmen, Jim Dickson al bajo, Dave Kettley a la guitarra solista, Brent Williams a la guitarra y teclados y Paul Larsen a la batería acompañaban a Younger, que dio con su inconfundible voz, sus movimientos y presencia escénica una lección de las que no se olvidan fácilmente.
El repertorio fue un escándalo, así cayeron We have landed (De Lower yourself), Waves form (De Incantations), Woe betide (Del Ep de 1995), Headin' south (De Distemper), Another sin (De Distemper), The wheel (De Gloria), Divine somehow (De Incantations), Asphalt (De Lower yourself), A window to see (De Incantations), Born out of time (Single de 1985, con el interludio a propósito del Down on the street de The Stooges), On top of me (De We got this!), My existence (De Gloria), The Burning of Rome (De Distemper) y Bonsoir à vous (De Gloria). En los bises escuchamos Like a curse (single de 1984), I swear (Single de 1989) y Coming apart (Del Distemper).
Un concierto en combustión continua, con ese garage-rock y rock and roll que nos permitió a los presentes disfrutar de un recital absolutamente brutal, como pudo comprobar el gran Javier de Gregorio que también asistió al evento.
Os dejo con el tema The burning of Rome tal y como sonó anoche.
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Doy fe de las justas y ponderadas palabras del amigo Savoy. Un concierto inolvidable, para mi de lo mejor que he visto este año. Los Chicos, una banda que en disco suena bien pero que ha sido parida para el directo. Su frontman haciendo el cabra loca por todo el local, el guitarrista trasegando una botella de vino, el bate sentado bajo una bandera palestina, el bajista sentado en un lejano confesionario, todo un desmadre visual..., ¡Alfredo Landa y Los Locos del Ritmo al poder!
ResponderEliminarDe The New Christs decir que al final del bolo, emocionados por un apoteósico aplauso del público, se abrazaron, elevaron al cielo sus ojos y (lo veo así) dijeron para sí mismos: esto es rock´n´roll and I Like It.
Un placer compartir contigo Savoy el bolo.
Nos vemos en la próxima.
Abrazo,
javierfuzzy.blogspot.com (Javier de Gregorio): Qué pasada querido amigo, fue un concierto para guardar en la retina y en las orejas. Los Chicos francamente han mejorado mucho desde la última vez que les vi, ese pub-rock duro que practican como dices está hecho para el directo, buenos teloneros. Pero querido Javier, lo de Mr. Rob Younger y sus secuaces fue una lección en toda regla, rock and roll del que se te mete en vena y no te suelta, y ese frontman que es Younger a lo Iggy Pop pero con las caderas en su sitio aún, delicia absoluta y delirio en el personal asistente, no es para menos. Una alegría verte tan joven como siempre.
EliminarAbrazos.