My Morning Jacket, la banda de Kentucky, editaron en 1999 su disco de debut de nombre The Tennessee Fire. Un año antes se habían formado y este primer álbum lo editaron en Darla Records, no sería hasta 2003 cuando firmaron para ATO Records. En sus inicios se les consideraban como uno de los grandes exponentes del revival del folk sureño norteamericano, pero además se convirtieron en una de las bandas más innovadoras y prometedoras ampliando esas raíces rock y country, abarcando estilos que iban desde la neo-psicodelia al funk, prog y reggae dentro de su experimentación sónica, con ese sonido empapado de reverberación que tanto gusta a su líder Jim James (que fueron acuñando con el tiempo), que cantaba, tocaba guitarra, armónica y banjo, el resto de la formación que grabó este disco fueron Johnny Quaid a las guitarras, Two Tone Tommy al bajo y J. Glenn a la batería. Un trabajo de sonido acústico en su mayoría, que evoca ese folk-country sureño con influencias de Johnny Cash o Neil Young.
Como anécdota decir que el nombre del grupo proviene de un abrigo que Jim James encontró mientras rebuscaba entre los restos de su bar favorito, que fue devastado por las llamas, dicho abrigo tenía las letras bordadas MMJ.
Heartbreakin man abría el disco debut, un tema de raíz acústica donde se ve ese primigenio estilo de country-folk sureño, en una composición de calidad con la soberbia voz de Jim.
Magnífico disco este de My Morning Jacket. Les he seguido muy parcialmente ("Circuital", 2011 y "The Waterfall", 2015), y este su primer disco es el que más me llegó. Recuerdo su impacto, música conocida pero la hacían nueva, como una nueva receta para los gourmets.
ResponderEliminarAbrazo
javierfuzzy.blogspot.com (Javier de Gregorio): Pues si, este debut es un buen disco. Yo tengo algunos discos más de ellos y me gusta su evolución y estilo, deseando verlos solos en una sala.
EliminarAbrazos.